Loray, Carlos
(Cañuelas, 1949)
Carlos Alberto Loray nació en Cañuelas el 12 de diciembre 1949, de padres tamberos, cursó estudios primarios en la escuela rural N°29, cuando se hallaba en Vicente Casares. Vivió rodeado de los tambos de La Martona hasta los 19 años, cuando decide acercarse al pueblo donde desempeñó distintos oficios, desde la herrería hasta el área de cultura de la Municipalidad, donde finalmente se jubiló.
En 1982 se casó con Mercedes Nascroile, matrimonio que le dio tres hijas, que ya lo han hecho abuelo. A partir de 1987 se ligó al tradicionalismo y comenzó escribir versos criollos. Hacia fines de los ´80, en un festival organizado por los bomberos voluntarios de Cañuelas presentó su poema titulado “Gauchos”, el mismo que llegó al conductor radial Oscar Lanusse quien lo estimuló a seguir. Poco tiempo después obtuvo el primer premio en un concurso de la Biblioteca Sarmiento con el poema “Vieja Estancia La Martona”; y en el certamen provincial “Alejandro Nicanor Krusich” de la Sociedad de Escritores Tradicionalistas de La Plata ganó la edición de su primer libro: Entre paisanos (1990). En los certámenes para toda la provincia del programa radial “Fogoneando” por esos años también obtuvo dos primeros premios.
A partir del año 2000 publicó tres libros más de edición artesanal: Palenqueando décimas, Recorriendo y Cantares de fogón, y en 2015 Del pago de Las Cañuelas, por la editorial Volveré del centro cultural cañuelense del mismo nombre.
El poeta y estudioso del criollismo, Carlos Raúl Risso, escribió sobre el autor: “Virtuoso del verso, con una gran facilidad para la rima y con una inspiración creadora que le permite pasearse con visos de realidad, por las variadísimas cuestiones de la vida campera, compone décimas de suma plasticidad, lo que las hace requeridas para sus repertorios por cantores y decidores; quizás fue Rubén Barcia el primero que les arrimara una guitarra y las llevara a la grabación, pero atrás vinieron Abel Ivroud, José Vulcano, el payador Guichón, Manuel Rosas, Carlos Parisotti, Alberto Merlo… y no son todos”. A esta lista, se suman Adrián Maggi, Carlos Ramón Fernández, Oscar Silva y el Resero de Matadero, todos quienes cantaron sus poemas.
A nivel latinoamericano, en Brasil, Río Grande do Sul, el cantor popular Jari Terres incluyó sus temas en varios trabajos, y en Uruguay, otros cultores de las tradiciones rurales han hecho lo mismo. Esta difusión le ha valido ser llamado “El poeta de Buenos Aires”. Por todo esto, recibió varios reconocimientos, entre ellos en 2019 el de Prócer de la Cultura Federal instituido por la asociación Juan de los Santos Amores.
Parte de su producción también ha quedado en el registro fonográfico, y así citamos los trabajos discográficos: Entre puesteros y mensuales, Desde el pago, De cara al sol, De mi cosecha y Mala herencia.
Sobre cómo llegan sus versos a la gente, lejos del aparato editorial, Loray decía en una entrevista de 2011: “Me voy con mi valija…y con ese ‘comprador’ comparto, nos sacamos fotos, tomamos un vino, comemos un chorizo seco. Ese contacto no lo cambio por nada, aunque sé que las librerías podrían tenerme. A mí me gusta verle la cara a la gente. Lo mío es una relación humana, necesito del afecto. El día que sienta que lo comercial está por encima de lo afectivo, temo perder la inspiración y la voluntad de escribir”.
Antologías cañuelenses en las que participó:
